sábado, 8 de agosto de 2009

Remy J. López

Es tal el mimetismo de Remy con su obra que, cuando te encuentras delante de él por primera vez, tienes la sensación de estar ante una figura emergida de uno de sus lienzos. Siempre de negro, de trazos sencillos y aspecto frágil, al verlo, uno piensa que el desarrollo de un estilo propio debió ir parejo al modelado de un personaje a la medida.

Conocí a Remy hace ya algún tiempo, en Cuenca, a donde él había llegado varios años atrás procedente de La Roda (Albacete) en busca de su propio destino. Esa noche, entre copa y copa, conversamos de pintura, de toros, de proyectos…y ya bien entrada la madrugada, me llevó a su casa-estudio. Todo era un poco surrealista, empezando por el acceso a la casa, a través de un bar de copas ("suelo trabajar de noche, así que no me importa el ruido").
Había que atravesar el local entero y, al fondo del mismo, unas escaleras servían de entrada a la casa-estudio que ocupaba las 3 ó 4 plantas que tenía el edificio. A medida que avanzábamos ascendiendo por ese “desorden ordenado” que era su hábitat, me iba mostrando cuadros acabados, cuadros por terminar, esculturas hechas con materiales reciclados, el tomo del Cossío (la biblia del toreo) en que él ha quedado inmortalizado, me habló de su "obsesión" por las maletas…y confundida con todo ese despliegue de arte, su cama, como una obra de reciclaje más.

Luego nos hemos vuelto a ver en varias ocasiones: Cuenca nuevamente, Madrid… y la penúltima vez en Granada, hace unos meses, en donde se había instalado un año atrás continuando con la búsqueda de su propio destino. Caminamos desde su casa en la Gran Vía hasta Puerta Real y, tomando un café en el antiguo Suizo*, me volvió a hablar de toros, de pintura y de su idea recurrente de cambiar nuevamente de aires (“aquí he tocado techo, no puedo crecer más”).

Días atrás, coincidiendo con que toreábamos cerca de Granada, nos volvimos a encontrar. Estuvimos tomando una copa en el Eshavira (¡cuánto tiempo sin entrar aquí!), en la zona de calle Elvira. Su idea de cambiar de aires se había afianzado (“cuando llegue el otoño, porque todavía tengo compromisos que cumplir aquí”). Estaba feliz, contento, ilusionado…

La temática de sus cuadros gira en torno a dos pilares fundamentales, la tauromaquia y el flamenco, pero tiene otras líneas entre las cuales hay una por la que siento especial debilidad: el Jazz. Pues bien, esos nuevos proyectos quizá le lleven más cerca de Bourbon Street que de la calle Alcalá.

Desde esta orilla, estaremos pendientes. ¡Suerte maestro!


*El Suizo era un clásico café de fines del S. XIX y principios del S. XX. Lugar de reunión de Lorca y toda la intelectualidad granadina de su época, yo, que cuando lo conocí, ya en su etapa de decadencia, todavía conservaba el glamour y la solera de otros tiempos, me niego a llamarlo Café Häagen Dazs. ¿me entendeis, no?



7 comentarios:

  1. A mi tambien me dejó impresionada la 1ª vez que vi algo suyo, tenia un amigo en un pueblo cerca a La Roda, Barrax, y por este chico empecé a enteresarme por su obra, ya que el toro es una de esas pasiones aun confesables, posteriormente Raúl Barcelos (tambien artista de Segovia) que es un hermano para mi y que hace cosas para morirse de bonitas, tambien me habló de él, ojalá y llegue al Bourbon Street!!

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  2. pero qué bien escribes jodío!! Vamos a tener que empezar a buscarte un editor.... Tu blog engancha y mucho!!! besitos.

    MJ

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  3. Ramiro tiene razón la mijeña escribes muy bien,te diré que estoy viviendo una etapa de mi vida muy dura y esta historia de Remy me ha emocionado,me encantaría echarle c..... (memoles)y vivir sola esa vida tan bohemia que necesito,son gente maravillosa.
    Que pena,que los medios den cancha a tantos frikis y se ayude tan poco a los artistas de verdad.
    Ramiro animo y sigue con esta bonita idea,un besazo.

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  4. Lo que te he dicho, tío. Eres un artista. Y además ya te lanzas a insertar imágenes y todo. ¡No tienes techo!
    Muy bueno lo del café suizo. Lo entiendo perfectamente. Un abrazo.

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  5. que bueno Ramiro, le encantará leerlo, seguro que si. beso!

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  6. SOY REMY,
    RAMIRO, HOY DESDE MIAMI TE DIGO MI VIDA ES TAL Y COMO TU ME CONOCES.
    ES MAS ESTOY EN LAS AMERICAS PERO LO UNICO QUE ME HACE SENTIR QUE CAMBIO DE PAIS SON LAS LEYES DE AQUI.CREO ME ESTOY ENCONTRANDO COMO PERSONA,ESTOY VIVIENDO SITUACIONES BONITAS PERSONALES CON LA COMUNIDAD CUBANA,ESTOY PINTANDO MI ARTE, PERO PIENSO QUE LO QUE ESTOY HACIENDO AQUI SOLO ES PARA DEMOSTRAR LO QUE HAGO Y SE HACER, PORSUPUESTO CON MI SENTIMIENTO.
    CREO QUE COMO YA TE DIGE ME ESTOY ENCONTRANDO Y TE CONTARE CON ESE CAFE MI FUTURO PENSAMIENTO, ESTOY APRENDIENDO A QUE NO IMPORTA DONDE ME ENCUENTRE AL FIN Y AL CABO TODO SE MUEVE POR LA ECONOMIA , POCA GENTE CON SENTIMIENTO ES CAPAZ DE HACERME RECORDAR COMO UNA PELICULA DE MI VIDA LO VIVIDO EN ESOS ENCUENTROS QUE HEMOS TENIDO EN LUGARES DIVERSOS PERO ESO SI,
    SIEMPRE TAN REALES QUE ALGUN DIA PINTARE UNA VIVENCIA NO UNA FIGURA Y SI UN SENTIMIENTO.
    TU HAS SIDO CAPAZ DE CON TUS PALABRAS SER TAL Y COMO FUE Y ES.
    GRACIASSSSSSSSSSSSSSS

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  7. Ramiro, acabo de descubrir tu blog, buscando información en la web sobre el artista Remy J. López y me han sorprendido varias cosas; primero el propio blog y su contenido que, creo como periodista, que es de una gran calidad humana y literaria, y segundo los comentarios de mi buen amigo Remy.
    En estos momentos acababa de despedir a Remy y a su mujer, la tonadillera Marian, tras una velada en la que hemos compartido la música de la guitarra flamenca y la voz de Maria junto a las experiencias (siempre gratificantes y frescas) de Remy.
    Como hija de pintor, me emocionan las vivencias bohemias de los artistas, pero como amiga, tras más de 25 años de seguir profesional y personalmente la trayectoria de Remy, quiero que sepas que has conocido sobre todo a un gran hombre y a un gran pintor.
    Como gran aficionada al Toro, a partir de hoy seguiré tu blog y lo recomendaré. Tatiana Kvesic

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